PARA INVESTIGAR
Ahora os toca a vosotros investigar sobre las fuentes de energía vistas.
Conocer el sol, el viento, el agua, el calor de la tierra y la biomas desde el aspecto energético.
El Sol
Casi toda la energía de que disponemos proviene del Sol. El término de radiación solar se refiere a los valores de irradiación solar, es decir, la cantidad de energía recibida por unidad de superficie en un tiempo determinado.
La radiación solar tiene otra importancia capital: otras formas de energía renovable, como el viento, las olas o la biomasa no son más que manifestaciones indirectas de ésta.
La cantidad de energía solar captada por la Tierra anualmente es aproximadamente de 5,4 x 1024 J, una cifra que representa 4.500 veces la energía que se consume.
La energía solar llega a la superficie de la Tierra por dos vías diferentes:
- Incidiendo en los objetos iluminados por el Sol, denominada radiación directa.
- Por reflexión de la radiación solar absorbida por el aire y el polvo atmosférico, llamada radiación difusa.
La primera es aprovechable de forma directa, mientras que las células fotovoltaicas aprovechan la segunda.
Energía Eólica
La fuerza del viento se aprovecha mediante grandes aerogeneradores que convierten directamente la fuerza del viento en energía eléctrica y que se reúnen formando los vistosos parques eólicos. Si los molinos son pequeños o domésticos se aplican al bombeo de agua y a la producción de electricidad, sobre todo en zonas rurales.
Actualmente, la contribución de la energía eólica a la generación de electricidad es todavía poco significativa. Pero es evidente que esta fuente energética tiene un amplio potencial de crecimiento
Algunos países empiezan a confiar en la energía eólica para la producción de hasta el 10% de su electricidad.
Los tres países líderes en producción de energía eólica en el mundo (Alemania, EEUU y España) añadieron en 1999 unos 2.600 MW de nueva capacidad y contabilizaron casi el 64% del total de aumentos mundiales del año.
Energía Hidráulica
El agua es, sin duda, el elemento más esencial y característico de nuestro planeta. Además, es una fuente de energía renovable con un enorme potencial de aprovechamiento, gracias a la circulación constante de la energía cinética contenida en su movimiento y de la energía potencial asociada a los saltos de agua.
Hasta hace poco menos de 100 años, se utilizaba la corriente de ríos rápidos para mover los molinos y moler el maíz.
El mayor aprovechamiento del agua se realiza en los saltos de las presas: allí el agua se encuentra retenida de manera artificial en embalses o pantanos mediante un dique o presa. Esta agua almacenada se utilizará posteriormente para el riego, para el abastecimiento de poblaciones o, principalmente, para la producción de energía eléctrica en una central hidroeléctrica.
La mayoría de las presas hidráulicas se destinan a la producción de energía eléctrica.Pero también presenta inconvenientes:
- Los emplazamientos hidráulicos suelen estar lejos de las grandes poblaciones, por lo que es necesario transportar la energía eléctrica producida a través de costosas redes.
- Efecto negativo que puede tener la creación de un embalse sobre el entorno, ya que afecta a la alteración cauces, provoca erosión, incide sobre las poblaciones, afecta a la perdida de suelos fértiles, etc.
La finalidad de las centrales hidroeléctricas es aprovechar, mediante un salto existente en un curso de agua, la energía potencial contenida en la masa de agua para convertirla en energía eléctrica, utilizando turbinas acopladas a alternadores.
Las minicentrales hidroeléctricas se pueden clasificar en dos grandes tipos:
Geotérmica
La energía geotérmica se aprovecha mediante un sistema de captación del calor de la Tierra, que los romanos ya habían utilizado para construir sus balnearios. Su aprovechamiento se divide entre instalaciones de baja y de alta temperatura. Las primeras se utilizan para el calentamiento de agua sanitaria o de viviendas, y las segundas, para producir electricidad a través de generadores y turbinas de vapor.
Actualmente se cree que la producción geotérmica de calor equivale al 40% del flujo medio de calor continental en la superficie de la Tierra.
Probablemente, los almacenamientos de calor más comunes son los denominados rocas secas, depósitos con temperaturas superiores a las medias.
Las Biomasas
La biomasa fue el primer combustible utilizado por la humanidad. De una forma genérica, se entiende por biomasa toda masa de material vivo renovable presente en un organismo u organismos, incluyendo parte de material inerte.
La energía que se puede obtener de la biomasa proviene de la luz solar, que, gracias al proceso de fotosíntesis, es aprovechada por las plantas verdes mediante reacciones químicas en las células vivas para coger dióxido de carbono del aire y transformarlo en sustancias orgánicas.La energía solar se transforma en energía química que se acumula en diferentes compuestos orgánicos y que es incorporada y transformada por el reino animal y vegetal que, por su parte, la transforma mediante procedimientos artificiales para obtener bienes de consumo.
Es importante destacar también el aspecto ambiental de la biomasa. Su aprovechamiento energético no contribuye a aumentar el efecto invernadero ya que el balance de emisiones de dióxido de carbono a la atmósfera es neutro.El dióxido de carbono generado en la combustión de la biomasa es reabsorbido mediante la fotosíntesis en el crecimiento de las plantas necesarias para su producción y, por tanto, no incrementa la cantidad de CO2 presente en la atmósfera.